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Nara Park | Naturaleza de los dioses

La ciudad te recibe con su particular paisaje, a pocos metros de la estación tenés paseos, galerías y callecitas, para experimentar la tradición del lugar. Podés comprar recuerdos, artesanías, ropa y disfrutar de la gastronomía.

Uno de los atractivos es el amasado del Mochi (pastel tradicional japonés), una verdadera puesta en escena de fuerza y coordinación. La ceremonia del mochi tradicional se llama Mochitsuki: el arroz cocido se machaca con mazos de madera (kine) en un mortero (usu). Dos personas se alternarán el trabajo, uno lo golpea y el otro gira y moja el mochi. Se obtiene una masa pegajosa, por lo general le dan forma de esfera o cubo.

Mochi kusa es una variedad verde del mochi dulce, con sabor a la planta «yomogi (artemisa)». Se usa para pastelería, relleno generalmente con pasta de porotos.

  • ADORADOS CIERVOS

Las verdaderas estrellas del lugar son los hermosos y adorados ciervos. Estos increíbles animales se encuentran en plena libertad dentro del parque, que cuenta con más de 500 hectáreas entre bosques, prados y lagunas. Este espacio de belleza escénica, es el hogar de más de 1200 ciervos Sika, considerados actualmente tesoros nacionales, en la antigüedad eran, nada más y nada menos que mensajeros de los dioses y por lo tanto sagrados.

Tanto es el respeto y la tranquilidad, que podés acariciarlos, alimentarlos y convivir con ellos. Por ¥150 (US$ 1,40) podés comprar unas galletas que les encantan. Un dato importante, es que estos amigos son «stalker» de bolsos en busca de más comida. La gente corría para poder evitar la demanda, igualmente no son para nada peligrosos.

Ciervo Sika
Faroles de piedra
Nara Park
Templo en la laguna
Rickshaw, tracción humana

Nara tiene mucho que ofrecer, y si realmente te gustan los animales es una experiencia muy recomendable para ponerte en contacto con estos «personajes» celebres de la región.

Come on away!

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